Somos el conjunto de un cuerpo perfecto , pero que envejece, una energía que nos impulsa, pero que se agota, y una conciencia que nos dirige a la que confundimos.

Este es el trabajo más profundo de la Spagyria y es lo que podríamos denominar el trabajo sobre el alma humana.  Las kimillas son los elixires más alquímicos que sobre todo van a trabajar sobre la evolución y la transformación de la conciencia del ser humano, intentando que esta pase de una conciencia vegetativa a una conciencia universal transcendente; transmutando, puliendo, modulando, perfeccionando las fuerzas y habilidades psíquicas del ser humano, para ponerlas al servicio de la conciencia.